miedo a aparcar

¿Tienes miedo a aparcar? ¡Lo puedes superar!

Conducir es algo que muchas personas tienen que hacer por obligación a diario. Sin embargo, eso no implica que estén contentos con lo que hacen, ya que sufren cada vez que se ponen al volante. Si estás entre ellos, no te preocupes. Siempre estás a tiempo de superar tus fobias. Una de las maniobras que más pánico provoca es la de estacionar. Son muchos los que se agobian a la hora de aparcar su vehículo. Somos conscientes de que a algunos lo llevan mejor y otros peor. Si te encuentras entre estos últimos, puedes estar tranquilo. El miedo a aparcar es algo bastante normal, pero lo bueno es que tiene solución. Ha llegado el momento de que conozcas algunos consejos para sentirte mucho más liberado. ¡Vas a convertirte en un profesional del aparcamiento! 

¡Es momento de olvidarse del miedo a aparcar!

  1. Practica en un lugar adecuado: Para olvidarse del miedo a aparcar está claro que lo más te va a ayudar es practicar. Eso no quiere decir que lo puedas hacer en determinados lugares, ya que puedes condicionar la conducción de los demás. Lo que debes hacer es buscar un sitio adecuado en el que haya varios carriles o en el que apenas haya tráfico. Ahí es donde vas a poder estar tranquilo, mientras coges todas las referencias a la perfección. No tendrás que preocuparte de nada, ya que nadie te meterá prisa o se enfadará. Por otro lado, recuerda que siempre hay que ir de menos a más. Comienza a aparcar en plazas muy amplias. Así no tendrás tantos errores y te sentirás cada vez más confiado. Cuando lo vayas dominando, es el momento de dar el paso de experimentar en sitios más estrechos. El progreso tiene que ser lento y óptimo. 
  2. Gestiona los puntos de referencia: Esto es fundamental para eliminar el miedo a aparcar. Si quieres aparcar en paralelo, tan solo tienes que colocar el final de la ventanilla trasera junto al final del coche que tienes al lado. Gira todo el volante y tú mismo notarás cuando debes hacer el último giro para que el coche quede colocado. Si fallas, no te preocupes. Te tranquilizas y haces las maniobras que sean necesarias. No te sientas débil, si tienes que volver a sacar el coche y aparcar de nuevo. Es normal. Por otro lado, recuerda que también puedes aparcar en batería. Si tienes el espacio suficiente, coloca el coche en diagonal para que la entrada a la plaza sea más sencilla. Cuando apenas te des cuenta, estarás aparcando sin tener que fijarte en cada parte de los coches implicados. De todas maneras, acuérdate de colocar todos los espejos retrovisores y utilízalos de tal manera que te sirvan para controlar todo lo que tienes alrededor. ¡No aparques a base de tocar los otros vehículos! 
  3. Usa la tecnología: Aunque siempre es bueno hacer todo por uno mismo, cada vez hay más avances que nos ayudan en nuestro día a día. Son muchos los modelos de coche que ya cuentan con asistencia para aparcamiento o cámaras que ayudan a que tengas claras todas las referencias. De hecho, hasta puedes escuchar un pitido que te avisa de que hay algo muy cerca con lo que estás a punto de chocar. Si te sirve para encontrar la tranquilidad necesaria para aparcar, ten todo activado y te costará muy poco realizar esta maniobra. Eso sí, es recomendable tener la confianza necesaria para aparcar sin ayudas extras. ¿Por qué? Porque todo puede fallar cuando menos te lo esperas y tienes que ser capaz de dar la respuesta adecuada. 

Ahora ya conoces algunos trucos para aprender a aparcar y ganar en confianza al volante. Tan solo tienes que ponerlos en práctica. De todas maneras, todo esto tiene mucho que ver con el aspecto psicológico. No dudes en practicar la respiración para relajarte cuando vayas a estacionar el coche. Espera a que tus pulsaciones bajen y todo será más sencillo. No es tan difícil como piensas. Si lo hace todo el mundo, tú también serás capaz. ¡Estamos seguros!