La actual pandemia por Covid-19 afecta o afectará a la práctica totalidad de los sectores productivos de nuestro país. En esta ocasión, nos gustaría aprovechar estas nuevas líneas de nuestro blog para explicaros cómo ha sido el impacto del coronavirus en el sector automovilístico, uno de los más importantes de nuestro país.

El brote de este virus no ha hecho otra cosa que azotar el planeta de una manera no vista anteriormente, poniendo en jaque a nuestra sociedad, en primer lugar, y a la economía. Salir de esta crisis requerirá un gran esfuerzo y muchos sacrificios. De hecho, sus efectos ya se están dejando ver.

La industria del automóvil española no iba a ser menos y las 17 plantas de automoción que se encuentran en nuestro territorio ya han anunciado medidas drásticas, como la paralización de la actividad para evitar que el coronavirus se siga extendiendo. Además, la dificultad para conseguir piezas con las que trabajar también ha obligado a tomar esta drástica decisión.

Volkswagen (Seat), PSA, Nissan, Ford, Mercedes-Benz, Renault e Iveco son las marcas que han sufrido el impacto del coronavirus en el sector automovilístico, debiendo cerrar la persiana de manera temporal hasta que la situación sea menos peligrosa o se pueda considerar controlada. Hay que tener presente que el desconocimiento que se tiene sobre este virus y su tremenda virulencia obligan a ser precavidos, luchando con todos los medios para frenar el aumento exponencial de los contagios.

Una de las principales consecuencias de esta pandemia mundial en este sector ha sido la cascada de ERTEs que se han dado en todas las empresas desde el primer momento del cierre de actividad. Además, por ejemplo, el grupo francés PSA ya ha anunciado el cierre progresivo de todas sus plantas de producción en Europa, lo que incluye a las tres que posee en nuestro país y que están alojadas en Madrid, Zaragoza y Vigo.

Un camino muy similar al que tomó Renault. La marca de automoción francesa detuvo su actividad industrial en España mientras dure el estado de alarma declarado a mediados de marzo a causa del Covid-19. Solo Renault emplea a más de 10.000 trabajadores en nuestro país repartidos entre Sevilla, Valladolid (con dos fábricas) y Palencia.

Ford, con 7.000 trabajadores en Valencia, también ha detenido su producción ante el agravamiento de la situación. Hay que especificar que se confirmaron un mínimo de tres casos positivos entre sus trabajadores.

El impacto del coronavirus en el sector automovilístico se puede comprobar fácilmente en Seat, la mayor empresa industrial de Cataluña y que pertenece al grupo Volkswagen. Así, se ha presentado un ERTE por fuerza mayor para casi 15.000 trabajadores, pudiendo alargarse durante cinco o seis semanas.

Nissan o Mercedes-Benz han seguido caminos parecidos con la paralización de su producción o la bajada de persiana hasta que la situación por el coronavirus dé un respiro.